viernes, 2 de noviembre de 2007

Aquello que aprendimos de Epi y Blas...(IV)


Esta entrega va dirigida a los conductores noveles, a los veteranos, a los conductores ocasionales, a los profesionales del volante, a todos y a todas.

El texto lo he rescatado de un correo que le envié a una amiga para felicitarle por su nueva condición de conductora. Mantendré el formato, ¡qué lo disfrutéis!

¡ENHORABUENA!

Acaba de conseguir ingresar en el Club Autos-Locos. Club elitista donde los haya ya que las pruebas de ingreso, como habrá podido comprobar, son duras.
Muchos son los que quieren entrar pero pocos los elegidos. Algunos en su afán por pertenecer ha este Club adquieren burdas copias del carné de socio en tómbolas de mala muerte.
Quiero aprovechar este momento de euforia compartida, para hacerle llegar los estatutos del Club Autos-Locos:

OBLIGACIONES
  1. Respete a los socios como a usted le gustaría que la respetasen.
  2. Considere a su vehículo como una parte de su persona.
  3. No mentarás a la madre de ningún conductor. Salvo excepciones tales como: que el conductor que le precede realice una maniobra sin previo aviso, que ese mismo conductor circule al estilo anglosajón imposibilitando su adelantamiento en vías con más de dos carriles, que tarde más de un segundo en reemprender la marcha una vez que el disco del semáforo se pone en verde (cómo saber cuánto es un segundo - es el tiempo que tarda el conductor impaciente en hacer sonar el claxon una vez que ha cambiado de color el disco-), etc.
  4. Respetarás a los ciclistas (no sea que entre ellos me encuentre yo)
  5. Si bebes, conduce despacio.
  6. Debes de ser responsable.
DERECHOS
  1. Tienes derecho a correr y recorrer las carreteras hasta donde desees.
  2. Tienes derecho a disfrutar de la libertad y auto-nomía de ser conductora.
  3. Tienes derecho a girar a la derecha (si la señal no te lo impide)
  4. Tienes derecho a girar a la izquierda (si la señal anterior te impide hacerlo a la derecha)
  5. Tienes derecho a circular a 0,48 (antes con la peseta a 80 Km/h)
  6. Tienes derecho a crear tus propias normas.
  7. Tienes derecho a no hacer caso de esta normativa.
  8. Y por último si te para la autoridad competente tienes derecho a permanecer en silencio.
CONSEJOS PRÁCTICOS

Qué hacer cuando se pincha una rueda.

Éste es un contratiempo que te puede ocurrir alguna vez. Cuando te suceda puedes seguir estas pautas:
  • Lo primero que has de hacer es acordarte de todos los santos.
  • Una vez descargado tu mal humor retira el vehículo de la vía.
  • Baja del coche y comprueba cuál de las cinco ruedas es la que está pinchada.
  • Después de detectarla comienza la ardua labor de cambiar la rueda. La primera opción:
  • Mira el asiento del copiloto por si llevas a alguien que haya realizado esa labor otras veces o que aunque no lo haya hecho, este dispuesto a pringarse por ti. Si no tienes esa suerte, pasa al plan B:
  • Coge el teléfono móvil y llama a quien creas capaz de realizar esa labor por ti en un corto espacio de tiempo. En el caso de que no de resultado este plan, pues tendrás que enfrentarte al problema.
  • Abre la guantera y saca el libro de instrucciones del coche. Abriéndolo por la página cincuenta, sujeta con los dedos índice y pulgar de la mano izquierda el extremo superior izquierdo de la página de ese mismo lado, a su vez con la mano derecha sujeta por la mitad la otra parte del manual. Con gesto enérgico desplaza tu mano izquierda hacia abajo, con lo que conseguirás romper el panfleto. De esta manera te sentirás mejor y podrás emprender de mejor talante la labor de cambiar la rueda.
  • Lo primero que has de hacer es buscar el gato, para ello puedes optar por llamarle "mixi, mixi, mixi" es muy probable que no conteste ya que últimamente los fabricantes de coches optan por colocar en los coches gatos sordos. En el caso de que el de tu auto sea de éstos pasemos al siguiente punto.
  • Los gatos de automóvil son animales de costumbres y suelen habitar bien en la parte anterior del vehículo o bien en la parte posterior del mismo cerca de la rueda de repuesto.
  • Una vez encontrado el felino, tener cuidado de que no os arañe, lo situaremos debajo del punto de apoyo más cercano a la rueda pinchada. Ya que si lo colocamos en cualquiera de los otros tres puntos y elevamos el coche nos resultará muy difícil sustituir la rueda malograda.
  • Ahora hemos de coger la rueda de repuesto, ésta puede estar dentro del maletero o bien debajo del mismo, en el segundo caso caerá cual huevo de gallina una vez soltemos el tornillo de sujeción.
  • Ahora llega la labor que requiere el empleo de la fuerza bruta, con la llave de tubo retiraremos todas las tuercas que contribuyen a la sujeción de la rueda al eje. Si no retiramos todas las tuercas el cambio de rueda será muy difícil.
  • Con la rueda de repuesto en la mano, realizamos la operación anterior al revés, de esta manera colocaremos la misma en el lugar de la pinchada.
  • Colocamos las piezas utilizadas en el lugar donde las encontramos.
  • Nos lavamos las manos, en caso de haber utilizado guantes nos los quitamos.
  • Por último, arrancamos y reemprendemos la marcha.
Qué hacer en caso de perderse

Muchos autores, todos ellos hombres, abogan por continuar dando vueltas ya que confían en su inexistente sexto sentido.
Otros creen que lo mejor es echar un vistazo al mapa.
Los más modernos confían en el GPS.
Pero yo recomiendo encarecidamente empezar por la última de las opciones que dan todos ellos... PREGUNTAR.

Sin más, te deseo que disfrutes conduciendo y con las personas que lleves contigo en el coche.

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