Es la pregunta que ronda mi cabeza. Hace unos años decidió retirarse de la F1 y centrar sus esfuerzos en MotoGP, alineó su estrategia comercial en pos de convertirse en la principal compañía de neumáticos de motos de calle. Analicemos la situación.El año en que anuncia su nueva estrategia en competición, se jubila el responsable de Michelin Competition, el cerebro de la marca en las carreras, el hombre que ha estado desde el comienzo en este circo y que sabía como nadie qué se necesitaba en cada momento.
El trasvase de información que generó la F1 a Bridgestone se vió enriquecido por el buen hacer de la marca de Borno Panigale que puso al descubierto la debilidad de Michelin. Ésta hubiese pasado inadvertida si su partner hubiese seguido llevando sus alas doradas a lo más alto del cajón.
Los movimientos que se están dando en el paddock apuntan a que se dé el temido receso de la firma francesa. El año pasado, Valentino Rossi apostó por pasarse a la competencia. Aunque con ello creara una división en la estructura de la marca de los diapasones. Su apuesta parece estar dando buenos resultados y esto no es bueno para Michelin.Ayer en Brno pudimos ver como Shinya Nakano corría con una Honda pata negra, el motivo es evidente, su equipo trabaja con Bridgestone y para una casa como HRC que le gusta tenerlo todo más que probado y atado disponer de esos datos les ayudará a tomar la decisión de abandonar a Michelin.
Si Honda da el sí quiero, veremos la próxima temporada MotoGP monomarca, como sucede en el mundial de Superbikes. En mi opinión, ese hecho perjudicará a la evolución de neumáticos ya que al no tener rival no te puedes comparar con nadie; además, eso no garantiza carreras más igualadas ya que el binomio moto-piloto pesa mucho. Y pensar que no hace tanto tiempo Dunlop estuvo presente en MotoGP y con ello fueron tres las marcas en el mundial. Esperaremos a octubre para conocer la respuesta.
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